34. Dame entendimiento, y guardaré tu ley y la observaré de todo corazón.
35. Guíame por la senda de tus mandamientos, porque en ella me deleito.
36. Inclina mi corazón a tus testimonios y no a la avaricia.
37. Aparta mis ojos para que no vean la vanidad; vivifícame en tu camino.
38. Confirma tu palabra a tu siervo que te teme.
39. Quita de mí el oprobio que temo, porque buenos son tus juicios.
40. He aquí, yo he anhelado tus preceptos; vivifícame en tu justicia.
41. Y venga a mí tu misericordia, oh Jehová; tu salvación, conforme a tu dicho.
42. Y daré respuesta a quien me afrenta, porque en tu palabra he confiado.
43. Y no quites de mi boca en ningún tiempo la palabra de verdad, porque en tus juicios espero.
44. Y guardaré tu ley siempre, para siempre jamás.
45. Y andaré en libertad, porque busqué tus preceptos.