1. ¿No clama la sabiduría, y da su voz el entendimiento?
2. Se pone en las alturas junto al camino, en las encrucijadas de las veredas,
3. junto a las puertas, a la entrada de la ciudad, en el umbral de las puertas da voces:
4. Oh hombres, a vosotros clamo; y dirijo mi voz a los hijos de los hombres.
5. Entended, oh ingenuos, prudencia; y vosotros, necios, sed de corazón entendido.
6. Escuchad, porque hablaré cosas excelentes, y abriré mis labios para decir cosas rectas.