52. Y todo el oro de la ofrenda que ofrecieron a Jehová los jefes de millares y de centenas fue de dieciséis mil setecientos cincuenta siclos.
53. Los hombres del ejército habían tomado botín cada uno para sí.
54. Recibieron, pues, Moisés y el sacerdote Eleazar el oro de los jefes de millares y de centenas, y lo llevaron al tabernáculo de reunión como recordatorio para los hijos de Israel delante de Jehová.