30. Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el llanto y el crujir de dientes.
31. Y cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará sobre el trono de su gloria.
32. Y serán reunidas delante de él todas las naciones; entonces apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
33. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a la izquierda.