13. Por eso les hablo por parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden.
14. De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dice:De oído oiréis, y no entenderéis;y viendo veréis, y no percibiréis.
15. Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyen pesadamente, y han cerrado sus ojos, no sea que vean con los ojos, y oigan con los oídos, y entiendan con el corazón, y se conviertan, y yo los sane.
16. Pero bienaventurados vuestros ojos, porque ven; y vuestros oídos, porque oyen.
17. Porque de cierto os digo que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron.
18. Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador:
19. Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo y arrebata lo que fue sembrado en su corazón; éste es el que fue sembrado junto al camino.
20. Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la palabra y de inmediato la recibe con gozo.