Reina-Valera 1909

Marcos 9:27-45 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

27. Pero Jesús, tomándole de la mano, le enderezó; y se levantó.

28. Y cuando él entró en casa, sus discípulos le preguntaron aparte: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera?

29. Y les dijo: Este género con nada puede salir, sino con oración y ayuno.

30. Y habiendo salido de allí, caminaron por Galilea; y no quería que nadie lo supiese,

31. porque enseñaba a sus discípulos y les decía: El Hijo del Hombre será entregado en manos de hombres, y le matarán; y después de haber muerto, resucitará al tercer día.

32. Pero ellos no entendían esta palabra y tenían miedo de preguntarle.

33. Y llegó a Capernaúm; y estando en casa, les preguntó: ¿Qué discutíais entre vosotros por el camino?

34. Pero ellos callaron, porque los unos con los otros habían discutido por el camino quién había de ser el mayor.

35. Entonces sentándose, llamó a los doce y les dijo: Si alguno quiere ser el primero será el postrero de todos y el servidor de todos.

36. Y tomó a un niño y lo puso en medio de ellos; y tomándole en sus brazos, les dijo:

37. El que reciba en mi nombre a uno de estos niños, a mí me recibe; y el que a mí me recibe, no me recibe a mí, sino al que me envió.

38. Y le respondió Juan, diciendo: Maestro, hemos visto a uno que en tu nombre echaba fuera demonios, pero él no nos sigue, y se lo prohibimos, porque no nos sigue.

39. Pero Jesús dijo: No se lo prohibáis, porque ninguno hay que haga milagro en mi nombre que luego pueda decir mal de mí.

40. Porque el que no está contra nosotros, por nosotros está.

41. Y cualquiera que os diere un vaso de agua en mi nombre, porque sois de Cristo, de cierto os digo que no perderá su recompensa.

42. Y a cualquiera que haga tropezar a uno de estos pequeñitos que creen en mí, mejor le fuera que se le atase una piedra de molino al cuello y que fuera echado al mar.

43. Y si tu mano te hiciere tropezar, córtala; mejor te es entrar manco en la vida, que teniendo dos manos, ir al infierno, al fuego que no puede ser apagado,

44. donde el gusano de ellos no muere, y el fuego nunca se apaga.

45. Y si tu pie te fuere ocasión de caer, córtalo; mejor te es entrar cojo en la vida, que teniendo dos pies, ser echado al infierno, al fuego que no puede ser apagado,