13. Y cuando se haya limpiado de su flujo el que tiene flujo, contará siete días desde su purificación, y lavará sus vestidos y lavará su cuerpo en aguas corrientes, y quedará puro.
14. Y al octavo día tomará dos tórtolas o dos pichones, y vendrá delante de Jehová a la entrada del tabernáculo de reunión y los dará al sacerdote.
15. Y los ofrecerá el sacerdote, uno como ofrenda por el pecado y el otro como holocausto; y le purificará el sacerdote de su flujo delante de Jehová.
16. Y el hombre, cuando tenga emisión de semen, lavará con agua todo su cuerpo y quedará impuro hasta el atardecer.