Reina-Valera 1909

Lamentaciones 1:1-10 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

1. ¡Qué solitaria ha quedado la ciudad populosa! La grande entre las naciones se ha vuelto como viuda; la princesa entre las provincias ha sido hecha tributaria.

2. Amargamente llora en la noche, y hay lágrimas en sus mejillas; no tiene quien la consuele entre todos sus amantes; todos sus amigos la han traicionado; se le volvieron enemigos.

3. Judá ha ido en cautiverio con aflicción y dura servidumbre; ella mora entre las naciones, y no halla descanso; todos sus perseguidores la alcanzan entre estrechuras.

4. Las calzadas de Sión están de duelo, porque no hay quien venga a las fiestas solemnes; todas sus puertas están desoladas, sus sacerdotes gimen, sus vírgenes están afligidas, y ella tiene amargura.

5. Sus enemigos se han convertido en sus gobernantes; sus aborrecedores fueron prosperados, porque Jehová la afligió por la multitud de sus transgresiones; sus hijos han ido al cautiverio delante del enemigo.

6. Desapareció toda la hermosura de la hija de Sión; sus príncipes han venido a ser como ciervos que no hallan pasto, y anduvieron sin fuerzas delante del perseguidor.

7. Jerusalén, cuando cayó su pueblo en manos del enemigo y no hubo quien la ayudase, se acordó, en los días de su aflicción y de sus angustias, de todas sus cosas deseables que tuvo desde los tiempos antiguos. La miraron los enemigos y se burlaron de su caída.

8. Gravemente ha pecado Jerusalén, por lo cual ella se ha vuelto cosa inmunda; todos los que la honraban la han despreciado, porque vieron su desnudez; y ella suspira y se vuelve atrás.

9. Su inmundicia está en sus faldas; no se acuerda de su final; por tanto, ella ha caído de manera sorprendente, sin tener quien la consuele. Mira, oh Jehová, mi aflicción, porque el enemigo se ha engrandecido.

10. Ha extendido su mano el adversario a todas sus cosas preciosas; ciertamente ella ha visto entrar en su santuario a las naciones, acerca de las cuales mandaste que no entrasen en tu congregación.