Reina-Valera 1909

Juan 18:10-25 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

10. Entonces Simón Pedro, que tenía una espada, la sacó, e hirió al siervo del sumo sacerdote y le cortó la oreja derecha. Y el siervo se llamaba Malco.

11. Jesús entonces dijo a Pedro: Guarda la espada en la vaina; la copa que el Padre me ha dado, ¿no la he de beber?

12. Entonces la compañía de soldados, y el tribuno y los guardias de los judíos prendieron a Jesús y le ataron.

13. Y le llevaron primeramente ante Anás, porque era suegro de Caifás, que era sumo sacerdote aquel año.

14. Y Caifás era el que había dado el consejo a los judíos de que convenía que un hombre muriese por el pueblo.

15. Y Simón Pedro y otro discípulo seguían a Jesús. Y este discípulo era conocido del sumo sacerdote, y entró con Jesús al patio del sumo sacerdote;

16. mas Pedro estaba fuera, a la puerta. Y salió aquel discípulo que era conocido del sumo sacerdote, y habló a la portera e hizo entrar a Pedro.

17. Entonces la criada portera dijo a Pedro: ¿No eres tú también de los discípulos de este hombre? Dijo él: No lo soy.

18. Y estaban de pie los siervos y los guardias que habían encendido un fuego, porque hacía frío y se calentaban; y también con ellos estaba Pedro de pie, calentándose.

19. Y el sumo sacerdote preguntó a Jesús acerca de sus discípulos y de su doctrina.

20. Jesús le respondió: Yo he hablado abiertamente al mundo; siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y nada he hablado en secreto.

21. ¿Por qué me preguntas a mí? Pregunta a los que han oído lo que les he hablado; he aquí, ellos saben lo que yo he dicho.

22. Y cuando él hubo dicho esto, uno de los guardias que estaba allí le dio una bofetada a Jesús, diciendo: ¿Así respondes al sumo sacerdote?

23. Jesús le respondió: Si he hablado mal, da testimonio de lo que está mal; pero si bien, ¿por qué me golpeas?

24. Anás entonces le envió atado a Caifás, el sumo sacerdote.

25. Estaba, pues, Pedro de pie, calentándose. Y le dijeron: ¿No eres tú de sus discípulos? Él negó y dijo: No lo soy.