Reina-Valera 1909

Josué 6:16-27 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

16. Y cuando los sacerdotes hubieron tocado las trompetas la séptima vez, Josué dijo al pueblo: Gritad, porque Jehová os ha entregado la ciudad.

17. Mas la ciudad será anatema a Jehová, ella y todas las cosas que están en ella; solamente Rahab la ramera vivirá, con todos los que estén en su casa, por cuanto escondió a los mensajeros que enviamos.

18. Pero guardaos vosotros del anatema; no toquéis ni toméis cosa alguna del anatema, no sea que hagáis anatema el campamento de Israel y lo turbéis.

19. Mas toda la plata, y el oro, y los objetos de bronce y de hierro, sean consagrados a Jehová, y vayan al tesoro de Jehová.

20. Entonces el pueblo gritó, y los sacerdotes tocaron las trompetas; y aconteció que cuando el pueblo hubo oído el sonido de las trompetas, el pueblo gritó con gran vocerío, y el muro se desplomó. Y el pueblo subió a la ciudad, cada uno derecho hacia delante, y la tomaron.

21. Y destruyeron completamente a filo de espada todo lo que en la ciudad había: hombres y mujeres, jóvenes y viejos, hasta los bueyes, y las ovejas, y los asnos.

22. Mas Josué dijo a los dos hombres que habían reconocido la tierra: Entrad en casa de la mujer ramera, y haced salir de allí a la mujer, y a todo lo que sea suyo, como lo jurasteis.

23. Y los jóvenes espías entraron, y sacaron a Rahab, y a su padre, y a su madre, y a sus hermanos, y todo lo que era suyo; y también sacaron a toda su parentela, y los pusieron fuera del campamento de Israel.

24. Y consumieron con fuego la ciudad, y todo lo que en ella había; solamente pusieron en el tesoro de la casa de Jehová la plata, y el oro, y los objetos de bronce y de hierro.

25. Mas Josué salvó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre, y a todo lo que ella tenía; y habitó ella entre los israelitas hasta hoy, por cuanto escondió a los mensajeros que Josué envió a reconocer a Jericó.

26. Y en aquel tiempo Josué les hizo este juramento, diciendo: Maldito sea delante de Jehová el hombre que se levante y reedifique esta ciudad de Jericó. En su primogénito eche sus cimientos, y en su hijo menor asiente sus puertas.

27. Estuvo, pues, Jehová con Josué, y su nombre se divulgó por toda la tierra.