8. Ciertamente yo buscaría a Dios y le encomendaría mi causa;
9. Él hace cosas grandes e inescrutables, y maravillas sin número;
10. él da la lluvia sobre la faz de la tierra y envía las aguas sobre los campos;
11. él pone en alto a los humildes y da seguridad a los enlutados;
12. él frustra los pensamientos de los astutos, para que sus manos no prosperen;
13. él prende a los sabios en su propia astucia, y el consejo de los perversos es malogrado.
14. De día éstos se topan con tinieblas y a mediodía andan a tientas como de noche.
15. Así él libra al pobre de la espada, de la boca y de la mano del poderoso.