14. Y el alma de los sacerdotes satisfaré con grosura, y mi pueblo será saciado de mi bondad, dice Jehová.
15. Así ha dicho Jehová: Voz fue oída en Ramá, llanto y lloro amargo; Raquel, lamentándose por sus hijos, no quiso ser consolada acerca de sus hijos, porque perecieron.
16. Así ha dicho Jehová: Reprime del llanto tu voz y de las lágrimas tus ojos, porque salario hay para tu trabajo, dice Jehová, y volverán de la tierra del enemigo.
17. Esperanza también hay para tu porvenir, dice Jehová, y los hijos volverán a su propio territorio.
18. Ciertamente he oído a Efraín que se lamentaba: Me has castigado, y fui castigado como novillo indómito; hazme volver y yo volveré, porque tú eres Jehová mi Dios.