Reina-Valera 1909

Isaías 64:3-9 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

3. Cuando descendiste, haciendo cosas terribles que nunca esperábamos, se derritieron los montes delante de ti.

4. Y desde la antigüedad nunca oyeron, ni oídos percibieron ni ojo había visto, oh Dios, fuera de ti, quien actuase en favor de aquel que en él espera.

5. Saliste al encuentro del que con alegría practicaba la justicia, de los que se acordaban de ti en tus caminos; he aquí, tú te enojaste porque pecamos y hemos continuado en los pecados largamente, ¿y seremos salvos?

6. Y todos nosotros somos como suciedad, y todas nuestras obras justas como trapo de inmundicia; y todos nos marchitamos como la hoja, y nuestras iniquidades nos llevan como el viento.

7. Y nadie hay que invoque tu nombre, que se despierte para apoyarse en ti; porque has escondido de nosotros tu rostro y nos has dejado marchitar a causa de nuestras iniquidades.

8. Ahora pues, Jehová, tú eres nuestro padre; nosotros somos el barro, y tú nuestro alfarero; así que obra de tus manos somos todos nosotros.

9. No te enojes sobremanera, oh Jehová, ni te acuerdes siempre de nuestra iniquidad; he aquí, mira, te rogamos, pueblo tuyo somos todos nosotros.