Reina-Valera 1909

Isaías 51:17-23 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

17. Despierta, despierta, levántate, oh Jerusalén, que bebiste de la mano de Jehová el cáliz de su ira; hasta los sedimentos del cáliz de aturdimiento bebiste.

18. De todos los hijos que dio a luz, no hay quien la guíe; ni quien la tome de la mano, de todos los hijos que crió.

19. Estas dos cosas te han acaecido (¿Quién se condolerá de ti?): Asolamiento y destrucción, hambre y espada. ¿Quién te consolará?

20. Tus hijos desmayaron; estuvieron tendidos en las encrucijadas de todas las calles, como antílope en la red, llenos del furor de Jehová, de la ira del Dios tuyo.

21. Oye, pues, ahora esto, afligida y ebria, pero no de vino.

22. Así dijo Jehová, tu Señor y tu Dios, quien aboga por su pueblo: He aquí, he quitado de tu mano el cáliz de aturdimiento, los sedimentos del cáliz de mi furor. Nunca más lo beberás.

23. Y lo pondré en mano de tus angustiadores, que dijeron a tu alma: Póstrate para que pasemos por encima. Y tú pusiste tu cuerpo como suelo y como calle para los que pasaban.