10. Y diez yugadas de viña producirán un bato, y un homer de semilla producirá un efa.
11. ¡Ay de los que se levantan de mañana para ir tras las bebidas fuertes y así siguen hasta la noche, hasta que el vino los enciende!
12. Y en sus banquetes hay arpas y vihuelas, tamboriles y flautas, y vino; y no consideran la obra de Jehová ni miran la obra de sus manos.
13. Por tanto mi pueblo fue llevado cautivo, porque no tuvo conocimiento; y sus hombres honorables perecen de hambre, y su multitud se seca de sed.
14. Por eso se ensanchó el Seol y sin medida abrió su boca; y allá descenderá la gloria de ellos, y su multitud, y su alboroto y el que en ella se regocijaba.
15. Y el hombre será humillado, y el varón será abatido, y serán bajados los ojos de los altivos.
16. Pero Jehová de los ejércitos será exaltado en juicio, y el Dios Santo será santificado con justicia.
17. Entonces los corderos pacerán según su costumbre, y extraños comerán en los lugares desolados de los engordados.
18. ¡Ay de los que traen la iniquidad con cuerdas de vanidad y el pecado como con coyundas de carreta,
19. los cuales dicen: Dése prisa, apresure él su obra para que la veamos; acérquese y venga el consejo del Santo de Israel, para que lo sepamos!
20. ¡Ay de los que a lo malo llaman bueno, y a lo bueno, malo; que hacen de la luz tinieblas y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!
21. ¡Ay de los sabios ante sus propios ojos, y de los que son prudentes delante de sí mismos!
22. ¡Ay de los que son valientes para beber vino, y hombres fuertes para mezclar bebida fuerte;
23. los que justifican al malvado por cohecho, y al justo quitan su justicia!
24. Por tanto, como la lengua del fuego consume el rastrojo, y la llama devora la paja, así será su raíz como podredumbre, y su flor se desvanecerá como polvo, porque han desechado la ley de Jehová de los ejércitos y han despreciado la palabra del Santo de Israel.