12. Y el Espíritu me dijo que fuese con ellos sin dudar. Y fueron también conmigo estos seis hermanos, y entramos en casa de un varón.
13. Él nos contó cómo había visto en su casa un ángel que, puesto de pie, le dijo: Envía hombres a Jope y haz venir a Simón, el que tiene por sobrenombre Pedro,
14. quien te hablará palabras por las cuales serás salvo tú y toda tu casa.
15. Y cuando comencé a hablar, cayó el Espíritu Santo sobre ellos también, como sobre nosotros al principio.
16. Entonces me acordé de lo que había dicho el Señor cuando dijo: Juan ciertamente bautizó en agua, pero vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo.
17. Así que, si Dios les dio también el mismo don que a nosotros que hemos creído en el Señor Jesucristo, ¿quién era yo para oponer resistencia a Dios?
18. Entonces, oídas estas cosas, callaron y glorificaron a Dios, diciendo: ¡De manera que también a los gentiles ha dado Dios arrepentimiento para vida!
19. Ahora bien, los que habían sido esparcidos a causa de la tribulación que sobrevino en tiempos de Esteban viajaron hasta Fenicia, y Chipre y Antioquía, no hablando a nadie la palabra, sino sólo a los judíos.