40. A éste levantó Dios al tercer día e hizo que se apareciese,
41. no a todo el pueblo, sino a los testigos que Dios había escogido de antemano, a nosotros que comimos y bebimos con él después que resucitó de entre los muertos.
42. Y nos mandó que predicásemos al pueblo y testificásemos que él es el que Dios ha puesto por Juez de los vivos y de los muertos.