Reina-Valera 1909

Génesis 19:17-34 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

17. Y aconteció que cuando los hubieron llevado fuera, uno dijo: Escapa por tu vida; no mires tras ti ni pares en toda esta llanura; escapa al monte, no sea que perezcas.

18. Y Lot les dijo: No, yo os ruego, señor mío.

19. He aquí ahora ha hallado tu siervo gracia ante tus ojos, y has engrandecido tu misericordia que has hecho conmigo dándome la vida; mas yo no podré escapar al monte, no sea que me alcance el mal, y muera.

20. He aquí, esta ciudad está cerca para huir allá, la cual es pequeña; escaparé ahora allá (¿no es ella pequeña?) y vivirá mi alma.

21. Y le respondió: He aquí, he recibido también tu súplica sobre esto, y no destruiré la ciudad de la que has hablado.

22. Date prisa, escápate allá, porque nada podré hacer hasta que hayas llegado allí. Por eso fue llamado el nombre de la ciudad Zoar.

23. El sol salía sobre la tierra cuando Lot llegó a Zoar.

24. Entonces hizo llover Jehová sobre Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de parte de Jehová desde los cielos;

25. y destruyó las ciudades y toda aquella llanura, con todos los moradores de aquellas ciudades y el fruto de la tierra.

26. Entonces la esposa de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal.

27. Y subió Abraham por la mañana al lugar donde había estado delante de Jehová.

28. Y miró hacia Sodoma y Gomorra, y hacia toda la tierra de aquella llanura; y miró, y he aquí que el humo subía de la tierra como el humo de un horno.

29. Así aconteció que cuando destruyó Dios las ciudades de la llanura, se acordó Dios de Abraham e hizo salir a Lot de en medio de la destrucción, al asolar las ciudades donde Lot estaba.

30. Pero Lot subió de Zoar y habitó en el monte, y sus dos hijas con él; porque tuvo miedo de quedarse en Zoar; y habitó en una cueva, él y sus dos hijas.

31. Entonces la mayor dijo a la menor: Nuestro padre es viejo, y no queda varón en la tierra que se llegue a nosotras, conforme a la costumbre de toda la tierra.

32. Ven, demos de beber vino a nuestro padre y durmamos con él, y conservaremos de nuestro padre descendencia.

33. Y dieron de beber vino a su padre aquella noche, y entró la mayor y durmió con su padre; mas él no sintió cuándo se acostó ella ni cuándo se levantó.

34. Al día siguiente dijo la mayor a la menor: He aquí yo dormí la noche pasada con mi padre; démosle de beber vino también esta noche, y entra y duerme con él, para que conservemos de nuestro padre descendencia.