67. sus camellos, cuatrocientos treinta y cinco; sus asnos, seis mil setecientos veinte.
68. Y algunos de los jefes de las casas paternas, cuando vinieron a la casa de Jehová que estaba en Jerusalén, ofrecieron voluntariamente para la casa de Dios, para reedificarla en su sitio.
69. Según sus posibilidades, dieron al tesorero de la obra sesenta y un mil dracmas de oro, y cinco mil libras de plata y cien túnicas sacerdotales.