Reina-Valera 1909

Eclesiastés 9:6-18 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

6. También su amor, y su odio y su envidia fenecieron ya; y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol.

7. Anda, come tu pan con gozo y bebe tu vino con alegre corazón, porque tus obras ya son agradables a Dios.

8. En todo tiempo sean blancos tus vestidos, y nunca falte ungüento sobre tu cabeza.

9. Goza de la vida con la mujer que amas, todos los días de la vida de tu vanidad que te son dados debajo del sol, todos los días de tu vanidad; porque ésta es tu parte en la vida y en tu trabajo con que te afanas debajo del sol.

10. Todo lo que te venga a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde tú vas, no hay obra, ni razonamiento, ni conocimiento ni sabiduría.

11. Me volví y vi debajo del sol que no es de los ligeros la carrera, ni la batalla de los fuertes, ni aun de los sabios el pan, ni de los prudentes las riquezas ni de los entendidos el favor, sino que tiempo y ocasión acontecen a todos.

12. Porque el hombre tampoco conoce su tiempo; como los peces que son apresados en la mala red y como las aves que son apresadas en el lazo, así son atrapados los hijos de los hombres en el tiempo malo, cuando cae de repente sobre ellos.

13. También he visto esta sabiduría debajo del sol, la cual me parece grande:

14. Había una pequeña ciudad, y pocos hombres en ella; y vino contra ella un gran rey, y la sitió y edificó contra ella grandes baluartes.

15. Y se hallaba en ella un hombre pobre y sabio, el cual libró la ciudad con su sabiduría; pero nadie se acordaba de aquel hombre pobre.

16. Entonces dije yo: Mejor es la sabiduría que la fuerza, aunque la sabiduría del pobre sea menospreciada y no sean escuchadas sus palabras.

17. Las palabras del sabio en quietud son más oídas que el clamor del gobernante entre los necios.

18. Mejor es la sabiduría que las armas de guerra; pero un solo pecador destruye mucho bien.