Reina-Valera 1909

Deuteronomio 12:10-23 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

10. Mas pasaréis el Jordán y habitaréis en la tierra que Jehová vuestro Dios os hace heredar, y él os dará reposo de todos vuestros enemigos alrededor, y habitaréis seguros.

11. Y al lugar que Jehová vuestro Dios escogiere para hacer habitar en él su nombre, allí llevaréis todas las cosas que yo os mando: vuestros holocaustos y vuestros sacrificios, vuestros diezmos y la ofrenda elevada de vuestras manos, y todo lo escogido de vuestros votos que hayáis prometido a Jehová.

12. Y os alegraréis delante de Jehová vuestro Dios, vosotros, y vuestros hijos, y vuestras hijas, y vuestros criados, y vuestras criadas y el levita que esté en vuestras poblaciones, por cuanto no tiene parte ni heredad con vosotros.

13. Cuídate de no ofrecer tus holocaustos en cualquier lugar que vieres,

14. sino en el lugar que Jehová escogiere, en una de tus tribus; allí ofrecerás tus holocaustos y allí harás todo lo que yo te mando.

15. Con todo, podrás matar y comer carne en todas tus poblaciones, conforme al deseo de tu alma, según la bendición que Jehová tu Dios te haya dado; el impuro y el limpio la comerá, como la de gacela o la de ciervo.

16. Salvo que la sangre no comeréis; sobre la tierra la derramaréis como agua.

17. Ni podrás comer en tus poblaciones el diezmo de tu grano, ni de tu vino, ni de tu aceite, ni las primicias de tus vacas, ni de tus ovejas, ni tus votos que hayas prometido, ni tus ofrendas voluntarias ni la ofrenda elevada de tu mano,

18. sino que delante de Jehová tu Dios las comerás, en el lugar que Jehová tu Dios haya escogido, tú, y tu hijo, y tu hija, y tu criado, y tu criada y el levita que esté en tus poblaciones; y te alegrarás delante de Jehová tu Dios en toda obra de tus manos.

19. Ten cuidado de no desamparar al levita en todos tus días sobre tu tierra.

20. Cuando Jehová tu Dios ensanche tu territorio, como él te ha dicho, y tú digas: Comeré carne, porque deseó tu alma comerla, conforme a todo el deseo de tu alma comerás carne.

21. Si está lejos de ti el lugar que Jehová tu Dios haya escogido, para poner allí su nombre, podrás matar de tus vacas y de tus ovejas que Jehová te haya dado, como te he mandado yo, y comerás en tus ciudades según todo lo que desee tu alma.

22. Así como se come la gacela y el ciervo, así las podrás comer; el impuro y el limpio también podrán comer de ellas.

23. Solamente asegúrate de no comer la sangre, porque la sangre es la vida; y no has de comer la vida juntamente con su carne.