Reina-Valera 1909

Daniel 6:1-14 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

1. Pareció bien a Darío constituir sobre el reino a ciento veinte sátrapas que estuviesen en todo el reino.

2. Y sobre ellos a tres gobernadores, de los cuales Daniel era uno, a quienes los sátrapas diesen cuenta, para que el rey no fuese perjudicado.

3. Pero Daniel mismo era superior a estos sátrapas y gobernadores, porque había en él un espíritu excelente; y el rey pensaba ponerlo sobre todo el reino.

4. Entonces los gobernadores y los sátrapas buscaron ocasión para acusar a Daniel con respecto a los asuntos del reino, pero no pudieron hallar ocasión alguna o falta, porque él era fiel, y ningún motivo de acusación ni falta fue hallado en él.

5. Entonces dijeron aquellos hombres: No hallaremos contra este Daniel ocasión alguna para acusarle, si no la hallamos contra él en relación con la ley de su Dios.

6. Entonces estos sátrapas y gobernadores se juntaron delante del rey y le dijeron así: Rey Darío, vive para siempre;

7. todos los gobernadores del reino, magistrados, sátrapas, consejeros y capitanes han acordado por consejo que se promulgue un edicto del rey, y se confirme que cualquiera que haga petición a cualquier dios u hombre fuera de ti, en el espacio de treinta días, oh rey, sea echado al foso de los leones.

8. Ahora, oh rey, publica el edicto y firma el documento, para que no se pueda revocar, conforme a la ley de Media y de Persia, la cual no puede ser abrogada.

9. Firmó, pues, el rey Darío el documento y el edicto.

10. Y Daniel, cuando supo que el documento había sido firmado, entró en su casa, y abiertas las ventanas de su aposento que daban hacia Jerusalén, se hincaba de rodillas tres veces al día, y oraba y daba gracias delante de su Dios, como lo solía hacer antes.

11. Entonces se juntaron aquellos hombres y hallaron a Daniel orando y rogando delante de su Dios.

12. Se acercaron luego y hablaron ante el rey acerca del edicto real: ¿No has firmado el edicto de que cualquiera que pida a cualquier dios u hombre fuera de ti, en el espacio de treinta días, oh rey, sea echado al foso de los leones? Respondió el rey y dijo: Verdad es, conforme a la ley de Media y de Persia, la cual no puede ser abrogada.

13. Entonces respondieron y dijeron delante del rey: Daniel, que es de los hijos de los cautivos de Judá, no te tiene en cuenta, oh rey, ni acata el edicto que firmaste, sino que tres veces al día hace su petición.

14. Entonces cuando el rey oyó el asunto, le pesó en gran manera y resolvió librar a Daniel; y hasta la puesta del sol trabajó para librarle.