Reina-Valera 1909

Apocalipsis 1:4-15 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

4. Juan, a las siete iglesias que están en Asia: Gracia a vosotros y paz del que es y que era y que ha de venir, y de los siete Espíritus que están delante de su trono;

5. y de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama, y nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre,

6. y nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sean gloria y dominio para siempre jamás. Amén.

7. He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, aun los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra se lamentarán por causa de él. Así sea. Amén.

8. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.

9. Yo, Juan, vuestro hermano y compañero en la tribulación, y en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla que es llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y del testimonio de Jesucristo.

10. Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,

11. que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último. Escribe en un libro lo que ves y envíalo a las siete iglesias que están en Asia: a Éfeso, y a Esmirna, y a Pérgamo, y a Tiatira, y a Sardis, y a Filadelfia y a Laodicea.

12. Y me volví para ver la voz que hablaba conmigo; y al volverme, vi siete candeleros de oro;

13. y en medio de los siete candeleros, a uno semejante al Hijo del Hombre, vestido con una ropa que le llegaba hasta los pies, y ceñido por el pecho con un cinto de oro.

14. Y su cabeza y sus cabellos eran blancos como la lana blanca, como la nieve; y sus ojos como llama de fuego;

15. y sus pies semejantes al bronce bruñido, ardiente como si estuviera en un horno; y su voz como el estruendo de muchas aguas.