Reina-Valera 1909

2 Reyes 4:6-16 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

6. Y sucedió que cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme otra vasija. Y él le dijo: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite.

7. Fue ella luego y se lo contó al hombre de Dios, quien dijo: Ve y vende el aceite y paga a tus acreedores; y tú y tus hijos vivid de lo que quede.

8. Y aconteció que un día pasaba Eliseo por Sunem; y había allí una mujer importante que le invitaba insistentemente a que comiese; y sucedía que cuando él pasaba por allí, entraba en su casa a comer.

9. Y ella dijo a su marido: He aquí, ahora yo entiendo que éste que siempre pasa por nuestra casa es un hombre santo de Dios.

10. Yo te ruego que hagas un pequeño aposento arriba con paredes, y pongamos en él cama, y mesa, y silla y candelero, para que cuando venga a nosotros, se quede en él.

11. Y aconteció que un día pasó él por allí, y se quedó en aquel aposento y durmió allí.

12. Entonces él le dijo a Giezi, su criado: Llama a esta sunamita. Y cuando él la llamó, ella se presentó ante él.

13. Y dijo él a Giezi: Dile: He aquí, tú nos has atendido con todo este esmero; ¿qué quieres que haga por ti? ¿Quieres que hable por ti al rey o al general del ejército? Y ella respondió: Yo habito en medio de mi pueblo.

14. Y él dijo: ¿Qué, pues, haremos por ella? Y Giezi respondió: He aquí, ella no tiene hijo y su marido ya es viejo.

15. Dijo entonces: Llámala. Y él la llamó, y ella se paró a la puerta.

16. Y él le dijo: Por esta temporada, según el tiempo de la vida, abrazarás un hijo. Y ella dijo: No, señor mío, hombre de Dios, no engañes a tu sierva.