Reina-Valera 1909

2 Corintios 4:1-10 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

1. Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos alcanzado, no desfallecemos;

2. antes bien, renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad, recomendándonos a nosotros mismos a toda conciencia humana delante de Dios.

3. Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto;

4. en quienes el dios de este mundo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el que es la imagen de Dios.

5. Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo el Señor; y nosotros somos vuestros siervos por causa de Jesús.

6. Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.

7. Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros;

8. estamos atribulados en todo, pero no angustiados; en apuros, pero no desesperados;

9. perseguidos, pero no desamparados; abatidos, pero no destruidos;

10. siempre llevamos en el cuerpo por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos.