Reina-Valera 1909

1 Reyes 3:16-26 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

16. En aquel tiempo vinieron al rey dos mujeres rameras, y se presentaron delante de él.

17. Y dijo una de ellas: ¡Ah, señor mío! Yo y esta mujer vivimos en la misma casa, y yo di a luz estando con ella en la casa.

18. Y aconteció al tercer día después que yo di a luz, que ésta dio a luz también, y estábamos juntas; ningún extraño estaba en casa, sino nosotras dos en la casa.

19. Y una noche el hijo de esta mujer murió, porque ella se acostó sobre él.

20. Y se levantó a medianoche, y tomó a mi hijo de junto a mí, mientras tu sierva estaba durmiendo, y lo puso a su lado, y puso a mi lado a su hijo muerto.

21. Y cuando yo me levanté de madrugada para dar el pecho a mi hijo, he aquí que estaba muerto; pero lo observé por la mañana y vi que no era mi hijo, el que yo había dado a luz.

22. Entonces la otra mujer dijo: No, mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto. Y la otra volvió a decir: No, tu hijo es el muerto, y mi hijo es el que vive. Así hablaban delante del rey.

23. El rey entonces dijo: Ésta dice: Mi hijo es el que vive, y tu hijo es el muerto; y la otra dice: No, el tuyo es el muerto, y mi hijo es el que vive.

24. Y dijo el rey: Traedme una espada. Y trajeron al rey una espada.

25. En seguida el rey dijo: Partid en dos al niño vivo, y dad la mitad a la una, y la otra mitad a la otra.

26. Entonces la mujer de quien era el hijo vivo habló al rey (porque sus entrañas se conmovieron por su hijo), y dijo: ¡Ah, señor mío! Dad a ésta el niño vivo, y no lo matéis. Pero la otra dijo: Ni a mí ni a ti; partidlo.