Reina-Valera 1909

1 Reyes 20:34-42 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

34. Y le dijo Ben-adad: Las ciudades que mi padre tomó al tuyo, yo las restituiré; y haz plazas en Damasco para ti, como mi padre las hizo en Samaria. Y yo, dijo Acab, te dejaré ir con este pacto. Hizo, pues, un pacto con él y le dejó ir.

35. Entonces un hombre de los hijos de los profetas dijo a su compañero por palabra de Dios: Hiéreme ahora. Pero el otro hombre no quiso herirle.

36. Y él le dijo: Por cuanto no has obedecido la palabra de Jehová, he aquí, cuando te apartes de mí, te matará un león. Y cuando se apartó de él, le salió al encuentro un león y lo mató.

37. Entonces se encontró con otro hombre y le dijo: Hiéreme ahora. Y el hombre le dio un golpe y le hizo una herida.

38. Y el profeta se fue y se puso delante del rey en el camino, y se disfrazó, poniéndose una venda sobre los ojos.

39. Y cuando el rey pasaba, él dio voces al rey y dijo: Tu siervo salió en medio de la batalla y he aquí, apartándose uno, me trajo un hombre y me dijo: Guarda a este hombre, y si llega a escapar, tu vida será por la suya, o pagarás un talento de plata.

40. Y mientras tu siervo estaba ocupado en una parte y en otra, él desapareció. Entonces el rey de Israel le dijo: Ésa será tu sentencia; tú la has pronunciado.

41. Pero él se quitó de pronto la venda de sobre sus ojos, y el rey de Israel reconoció que era uno de los profetas.

42. Y él le dijo: Así ha dicho Jehová: Por cuanto dejaste escapar de tus manos al hombre que yo había condenado, tu vida será por la suya, y tu pueblo por el suyo.