25. Entonces el rey Salomón envió a Benaía hijo de Joiada, el que arremetió contra él y murió.
26. Y al sacerdote Abiatar dijo el rey: Vete a Anatot, a tus campos, pues tú eres digno de muerte; pero no te mataré hoy, por cuanto has llevado el arca de Jehová el Señor delante de David, mi padre, y además has sido afligido en todas las cosas en las que fue afligido mi padre.
27. Así echó Salomón a Abiatar del sacerdocio de Jehová, para que se cumpliese la palabra de Jehová que había dicho en Silo sobre la casa de Elí.
28. Y llegó la noticia hasta Joab, porque también Joab se había adherido a Adonías, aunque no se había adherido a Absalón. Y huyó Joab al tabernáculo de Jehová y se asió de los cuernos del altar.