Reina-Valera 1909

1 Pedro 2:6-21 Reina-Valera 1909 (RVR1909)

6. Por lo cual también contiene la Escritura:He aquí, pongo en Sión la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa;y el que crea en él, no será avergonzado.

7. Él es, pues, honor a vosotros los que creéis; pero para los desobedientes,la piedra que los edificadores desecharon,ésta ha venido a ser la cabeza del ángulo,

8. y piedra de tropiezo y roca de escándalo para aquellos que, siendo desobedientes, tropiezan en la palabra, para lo cual fueron también señalados.

9. Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas a su luz admirable.

10. Vosotros, que en el tiempo pasado no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en el tiempo pasado no habíais alcanzado misericordia, pero que ahora habéis alcanzado misericordia.

11. Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma,

12. manteniendo vuestra conducta ejemplar entre los gentiles, para que, en lo que ellos murmuran de vosotros como de malhechores, glorifiquen a Dios en el día de la visitación, al considerar vuestras buenas obras.

13. Por causa del Señor, estad, pues, sujetos a toda autoridad humana, ya sea al rey como superior,

14. ya a los gobernadores como enviados por él para castigo de los malhechores y para loor de los que hacen el bien.

15. Porque ésta es la voluntad de Dios: que haciendo el bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres insensatos;

16. actuad como libres, y no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios.

17. Honrad a todos. Amad a los hermanos. Temed a Dios. Honrad al rey.

18. Siervos, estad sujetos con todo respeto a vuestros amos; no solamente a los buenos y afables, sino también a los rigurosos.

19. Porque esto es elogiable: que alguno a causa de la conciencia ante Dios sufra molestias, padeciendo injustamente.

20. Porque, ¿qué mérito tiene si al pecar vosotros sois abofeteados y lo soportáis con paciencia? Pero si al hacer el bien sois afligidos y lo soportáis con paciencia, esto ciertamente es agradable delante de Dios.

21. Porque para esto fuisteis llamados, pues también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pasos;