Nueva Biblia al Día

Marcos 14:35-47 Nueva Biblia al Día (NBD)

35. Se alejó un poco y, postrado en tierra, oró pidiéndole a Dios que si era posible no tuviera él que pasar por aquella hora.

36. Al orar, decía: «Abba, Padre, para ti todo es posible. No me hagas beber este trago amargo; pero no se haga lo que yo quiero sino lo que tú quieres».

37. Después regresó a donde estaban sus discípulos y los encontró dormidos.Le dijo a Pedro: «Simón, ¿estás dormido? ¿No pudiste mantenerte despierto ni una hora?

38. Vigilen y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil».

39. Se alejó otra vez e hizo la misma oración.

40. Al regresar, los volvió a encontrar dormidos, porque se les cerraban los ojos de sueño. Y no sabían qué decirle.

41. Cuando regresó por tercera vez, les dijo: «¿Todavía están durmiendo y descansando? ¡Ya fue suficiente! Ha llegado la hora en que el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los pecadores.

42. ¡Levántense! ¡Vámonos! Aquí viene el que me traiciona».

43. No había terminado de hablar Jesús cuando llegó Judas, uno de los doce. Venía acompañado de mucha gente armada con espadas y palos, a la que habían enviado los jefes de los sacerdotes, los maestros de la ley y los ancianos.

44. A éstos el traidor les había dado esta contraseña: «Al que yo bese, ése es; arréstenlo y llévenselo bien asegurado».

45. Al llegar Judas, se acercó rápidamente a Jesús, lo besó y le dijo:—¡Maestro!

46. Entonces los hombres arrestaron a Jesús.

47. Pero uno de los que estaban allí, sacó su espada e hirió al siervo del sumo sacerdote, cortándole una oreja.