14. No hubo antes ni ha habido después un día como aquel, en que el Señor obedeciera a un ser humano. Es que el Señor combatía en favor de Israel.
15. A continuación Josué regresó con todo Israel al campamento de Guilgal.
16. Los cinco reyes derrotados huyeron y se escondieron en la cueva de Maquedá.