La Palabra Versión Hispanoamericana

1 Corintios 3:7-18 La Palabra Versión Hispanoamericana (BLPH)

7. Así que ni el que planta ni el que riega cuentan para nada; Dios, que hace crecer, es el que cuenta.

8. Y entre el oficio de plantar o el de regar no hay diferencia, si bien cada uno recibirá el salario en proporción a su trabajo.

9. Nosotros somos colaboradores de Dios; ustedes son el campo que Dios cultiva, la casa que Dios edifica.

10. Yo, respondiendo al don que Dios me ha concedido, he puesto los cimientos como buen arquitecto; otro es el que levanta el edificio. Mire, sin embargo, cada uno cómo lo hace.

11. Desde luego, el único cimiento válido es Jesucristo, y nadie puede poner otro distinto.

12. Pero sobre ese cimiento puede construirse con oro, plata y piedras preciosas, o bien con madera, paja y cañas.

13. El día del Señor pondrá de manifiesto el valor de lo que cada uno haya hecho, pues ese día vendrá con fuego, y el fuego pondrá a prueba la consistencia de lo que cada uno haya hecho.

14. Aquel cuyo edificio, levantado sobre el cimiento, se mantenga firme, será premiado;

15. aquel cuyo edificio no resista al fuego, será castigado. A pesar de lo cual, él se salvará, si bien como el que a duras penas escapa de un incendio.

16. ¿Ignoran ustedes acaso que son templo de Dios y morada del espíritu divino?

17. Si destruyen el templo de Dios, Dios mismo los destruirá a ustedes; no en vano el templo de Dios es algo santo, y ustedes mismos son ese templo.

18. Que nadie se engañe. Si alguno de ustedes presume de sabio según los criterios de este mundo, mejor será que se convierta en necio, para alcanzar así la verdadera sabiduría.