La Biblia: La Palabra de Dios para Todos

Génesis 41:27-43 La Biblia: La Palabra de Dios para Todos (PDT)

27. Las siete vacas flacas y feas que salieron después son siete años, igual que las siete espigas quemadas y secas. Esos son siete años de escasez.

28. Dios le está mostrando lo que él va a hacer pronto.

29. Durante siete años habrá abundancia de comida en toda la tierra de Egipto.

30. Después de esos siete años vendrán otros siete años de escasez. La gente de Egipto se olvidará de toda la gran cantidad de comida que había antes. La escasez destruirá al país.

31. La abundancia quedará en el olvido porque la escasez que vendrá después va a ser muy fuerte.

32. »Y el significado de haber tenido dos sueños repetidos es este: Dios ya decidió que va a hacer esto y todo va a pasar muy pronto.

33. Entonces el faraón debe buscar un hombre sabio e inteligente para ponerlo a cargo de Egipto.

34. Después el faraón debe asignar gente que recoja una quinta parte de lo que produzca Egipto en lo siete años de abundancia.

35. Deben recolectar toda la comida de estos años buenos que vienen, almacenar el grano bajo el control del faraón en ciudades determinadas y cuidarlo.

36. Esta comida va a ser una reserva para la tierra para los siete años de escasez que caerán sobre Egipto. De esta manera no se destruirá el país.

37. El faraón y todos sus ministros aprobaron la propuesta.

38. Luego el faraón les dijo a sus ministros: —¿Podríamos encontrar a otro hombre como este, que tenga el espíritu de Dios en él?

39. Entonces el faraón le dijo a José: —Como Dios te ha mostrado todo esto a ti, no existe nadie más sabio e inteligente que tú.

40. Tú estarás a cargo de mi palacio y toda mi gente obedecerá tus órdenes. El faraón será el único con más poder que tú.

41. Después el faraón le dijo a José: —Mira, te he puesto a cargo de toda la tierra de Egipto.

42. Luego el faraón se quitó el anillo real de su mano y se lo colocó en la mano a José. Lo vistió con ropa muy fina y le colgó una cadena de oro en el cuello.

43. Lo hizo montar en la segunda carroza real y la gente gritaba frente a él: «¡Abran paso!» Entonces así, el rey lo puso a cargo de toda la tierra de Egipto.