14. Entonces las mujeres dijeron a Noemí: Bendito sea el Señor que no te ha dejado hoy sin redentor; que su nombre sea célebre en Israel.
15. Sea él también para ti restaurador de tu vida y sustentador de tu vejez; porque tu nuera, que te ama y es de más valor para ti que siete hijos, le ha dado a luz.
16. Entonces Noemí tomó al niño, lo puso en su regazo y fue su nodriza.
17. Y las mujeres vecinas le dieron un nombre, diciendo: Le ha nacido un hijo a Noemí. Y lo llamaron Obed. El es el padre de Isaí, padre de David.