6. No considera la senda de la vida; sus senderos son inestables, y no lo sabe.
7. Ahora pues, hijos míos, escuchadme, y no os apartéis de las palabras de mi boca.
8. Aleja de la extraña tu camino, y no te acerques a la puerta de su casa;
9. no sea que des tu vigor a otros y tus años al cruel;
10. no sea que se sacien los extraños de tus bienes, y tu esfuerzo vaya a casa del extranjero;
11. y al final te lamentes, cuando tu carne y tu cuerpo se hayan consumido,
12. y digas: ¡Cómo he aborrecido la instrucción, y mi corazón ha despreciado la corrección!
13. No he escuchado la voz de mis maestros, ni he inclinado mi oído a mis instructores.
14. He estado a punto de completa ruina en medio de la asamblea y la congregación.
15. Bebe agua de tu cisterna y agua fresca de tu pozo.
16. ¿Se derramarán por fuera tus manantiales, tus arroyos de aguas por las calles?