La Biblia De Las Americas

Números 11:17-29 La Biblia De Las Americas (LBLA)

17. Entonces descenderé y hablaré contigo allí, y tomaré del Espíritu que está sobre ti y lo pondré sobre ellos, y llevarán contigo la carga del pueblo para que no la lleves tú solo.

18. Y di al pueblo: "Consagraos para mañana, y comeréis carne, pues habéis llorado a oídos del Señor, diciendo: '¡Quién nos diera a comer carne! Porque nos iba mejor en Egipto.' El Señor, pues, os dará carne y comeréis.

19. "No comeréis un día, ni dos días, ni cinco días, ni diez días, ni veinte días,

20. sino todo un mes, hasta que os salga por las narices y os sea aborrecible, porque habéis rechazado al Señor, que está entre vosotros, y habéis llorado delante de El, diciendo: '¿Por qué salimos de Egipto?'"

21. Pero Moisés dijo: El pueblo, en medio del cual estoy, llega a seiscientos mil de a pie; y tú has dicho: "Les daré carne a fin de que coman, por todo un mes."

22. ¿Sería suficiente degollar para ellos las ovejas y los bueyes? ¿O sería suficiente juntar para ellos todos los peces del mar?

23. Y el Señor dijo a Moisés: ¿Está limitado el poder del Señor? Ahora verás si mi palabra se te cumple o no.

24. Salió Moisés y dijo al pueblo las palabras del Señor. Reunió después a setenta hombres de los ancianos del pueblo y los colocó alrededor de la tienda.

25. Entonces el Señor descendió en la nube y le habló; y tomó del Espíritu que estaba sobre él y lo colocó sobre los setenta ancianos. Y sucedió que cuando el Espíritu reposó sobre ellos, profetizaron; pero no volvieron a hacerlo más.

26. Pero dos hombres habían quedado en el campamento; uno se llamaba Eldad, y el otro se llamaba Medad. Y el Espíritu reposó sobre ellos (ellos estaban entre los que se habían inscrito, pero no habían salido a la tienda), y profetizaron en el campamento.

27. Y un joven corrió y avisó a Moisés, diciendo: Eldad y Medad están profetizando en el campamento.

28. Entonces respondió Josué, hijo de Nun, ayudante de Moisés desde su juventud, y dijo: Moisés, señor mío, detenlos.

29. Pero Moisés le dijo: ¿Tienes celos por causa mía? ¡Ojalá todo el pueblo del Señor fuera profeta, que el Señor pusiera su Espíritu sobre ellos!