4. De nuevo Pilato le preguntó, diciendo: ¿No respondes nada? Mira de cuántas cosas te acusan.
5. Pero Jesús no respondió nada más; de modo que Pilato estaba asombrado.
6. Ahora bien, en cada fiesta él acostumbraba soltarles un preso, el que ellos pidieran.
7. Y uno llamado Barrabás había sido encarcelado con los sediciosos que habían cometido homicidio en la insurrección.
8. Y subiendo la multitud, comenzó a pedirle que hiciera como siempre les había hecho.