19. Y el Señor Dios formó de la tierra todo animal del campo y toda ave del cielo, y los trajo al hombre para ver cómo los llamaría; y como el hombre llamó a cada ser viviente, ése fue su nombre.
20. Y el hombre puso nombre a todo ganado y a las aves del cielo y a toda bestia del campo, mas para Adán no se encontró una ayuda que fuera idónea para él.
21. Entonces el Señor Dios hizo caer un sueño profundo sobre el hombre, y éste se durmió; y Dios tomó una de sus costillas, y cerró la carne en ese lugar.
22. Y de la costilla que el Señor Dios había tomado del hombre, formó una mujer y la trajo al hombre.
23. Y el hombre dijo: Esta es ahora hueso de mis huesos, y carne de mi carne; ella será llamada mujer, porque del hombre fue tomada.
24. Por tanto el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
25. Y estaban ambos desnudos, el hombre y su mujer, y no se avergonzaban.