3. Tus dos pechos, como dos crías mellizas de gacela.
4. Tu cuello, como torre de marfil, tus ojos, como los estanques en Hesbón junto a la puerta de Bat-rabim; tu nariz, como la torre del Líbano que mira hacia Damasco.
5. Tu cabeza te corona como el Carmelo, y la cabellera suelta de tu cabeza es como hilos de púrpura; el rey está preso en tus trenzas.
6. ¡Qué hermosa y qué encantadora eres, amor mío , con todos tus encantos!
7. Tu estatura es semejante a la palmera, y tus pechos, a sus racimos.
8. Yo dije: "Subiré a la palmera, asiré sus frutos. ¡Sean tus pechos como racimos de la vid, el perfume de tu aliento como manzanas,
9. y tu paladar como el mejor vino! Entra suavemente el vino en mi amado, como fluye por los labios de los que se duermen.
10. Yo soy de mi amado, y su deseo tiende hacia mí.
11. Ven, amado mío, salgamos al campo, pasemos la noche en las aldeas.
12. Levantémonos temprano y vayamos a las viñas; veamos si la vid ha brotado, si se han abierto sus flores, y si han florecido los granados. Allí te entregaré mi amor.
13. Las mandrágoras han exhalado su fragancia, y a nuestras puertas hay toda clase de frutas escogidas, tanto nuevas como añejas, que he guardado, amado mío, para ti.