La Biblia De Las Americas

2 Crónicas 24:8-19 La Biblia De Las Americas (LBLA)

8. Entonces el rey, mandó que hicieran un cofre y lo colocaran afuera, junto a la puerta de la casa del Señor.

9. Y proclamaron en Judá y en Jerusalén que trajeran al Señor la contribución que Moisés, siervo de Dios, impuso sobre Israel en el desierto.

10. Todos los oficiales y todo el pueblo se regocijaron y trajeron sus contribuciones y las echaron en el cofre hasta llenarlo.

11. Y sucedía que siempre que el cofre era traído al oficial del rey por los levitas, y cuando veían que había mucho dinero, entonces el escriba del rey y el oficial del sumo sacerdote venían, vaciaban el cofre, lo tomaban y lo volvían a su lugar. Así hacían diariamente y recogían mucho dinero.

12. Y el rey y Joiada lo daban a los que hacían la obra del servicio de la casa del Señor; y contrataron canteros y carpinteros para reparar la casa del Señor, y también artífices en hierro y bronce para reparar la casa del Señor.

13. Los obreros trabajaron, y el trabajo de reparación progresó en sus manos, y restauraron la casa de Dios conforme a sus planos y la reforzaron.

14. Cuando terminaron, trajeron el resto del dinero delante del rey y de Joiada; y lo convirtieron en utensilios para la casa del Señor, utensilios para el ministerio y para el holocausto, y recipientes y utensilios de oro y de plata. Y todos los días de Joiada ofrecieron holocaustos en la casa del Señor continuamente.

15. Envejeció Joiada y a una edad muy avanzada murió; tenía ciento treinta años cuando murió.

16. Y lo sepultaron en la ciudad de David con los reyes, porque había hecho bien en Israel, y a Dios y a su templo.

17. Pero después de la muerte de Joiada vinieron los oficiales de Judá y se inclinaron ante el rey, y el rey los escuchó.

18. Y abandonaron la casa del Señor, el Dios de sus padres, y sirvieron a las Aseras y a los ídolos; entonces vino la ira de Dios sobre Judá y Jerusalén a causa de esta culpa suya.

19. No obstante, El les envió profetas para hacerlos volver al Señor; y aunque éstos dieron testimonio contra ellos, ellos no escucharon.