La Biblia De Las Americas

2 Crónicas 36:1-14 La Biblia De Las Americas (LBLA)

1. Entonces el pueblo de la tierra tomó a Joacaz, hijo de Josías, y lo proclamó rey en Jerusalén en lugar de su padre.

2. Joacaz tenía veintitrés años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén.

3. Entonces el rey de Egipto lo destituyó en Jerusalén, e impuso a la tierra una multa de cien talentos de plata y un talento de oro.

4. Y el rey de Egipto puso por rey sobre Judá y Jerusalén, a Eliaquim, hermano de Joacaz, y cambió su nombre por el de Joacim; pero a su hermano Joacaz, lo tomó Necao y lo llevó a Egipto.

5. Joacim tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén; e hizo lo malo ante los ojos del Señor su Dios.

6. Subió contra él Nabucodonosor, rey de Babilonia, y lo ató con cadenas de bronce para llevarlo a Babilonia.

7. Nabucodonosor también llevó algunos de los objetos de la casa del Señor a Babilonia, y los puso en su templo en Babilonia.

8. Los demás hechos de Joacim, las abominaciones que hizo y lo que fue hallado contra él, he aquí, están escritos en el libro de los reyes de Israel y de Judá. Su hijo Joaquín reinó en su lugar.

9. Joaquín tenía ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses y diez días en Jerusalén, e hizo lo malo ante los ojos del Señor.

10. Y a la vuelta del año el rey Nabucodonosor mandó que lo trajeran a Babilonia con los objetos preciosos de la casa del Señor, e hizo a su pariente Sedequías rey sobre Judá y Jerusalén.

11. Sedequías tenía veintiún años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén.

12. E hizo lo malo ante los ojos del Señor su Dios; y no se humilló delante del profeta Jeremías que le hablaba por boca del Señor.

13. También se rebeló contra el rey Nabucodonosor que le había hecho jurar fidelidad por Dios. Pero endureció su cerviz y obstinó su corazón en vez de volverse al Señor, Dios de Israel.

14. Asimismo todos los jefes de los sacerdotes y el pueblo fueron infieles en gran manera, y siguieron todas las abominaciones de las naciones, y profanaron la casa del Señor que El había consagrado en Jerusalén.