13. Y eran más de cuarenta los que habían hecho esta conjuración,
14. los que fueron a los principales sacerdotes y a los ancianos y dijeron: Nosotros nos hemos juramentado bajo maldición a no gustar nada hasta que hayamos dado muerte a Pablo.
15. Ahora, pues, vosotros, con el concilio, requerid al tribuno que le traiga mañana ante vosotros, como que queréis averiguar alguna cosa más cierta acerca de él; y nosotros, antes que él llegue, estaremos preparados para matarle.
16. Entonces el hijo de la hermana de Pablo, oyendo hablar de la celada, fue y entró en la fortaleza, y dio aviso a Pablo.
17. Y Pablo, llamando a uno de los centuriones, dijo: Lleva a este joven al tribuno, porque tiene cierto aviso que darle.
18. Él entonces, tomándole, le llevó al tribuno y dijo: El preso Pablo me llamó y me rogó que te trajese a este joven, que tiene algo que hablarte.
19. Y el tribuno, tomándole de la mano y retirándose aparte, le preguntó: ¿Qué es lo que tienes que decirme?
20. Y él dijo: Los judíos han acordado rogarte que mañana lleves a Pablo ante el concilio, como que van a inquirir alguna cosa más cierta acerca de él.
21. Pero tú no les creas, porque más de cuarenta hombres de ellos le acechan, los que se han juramentado bajo maldición a no comer ni beber hasta que le hayan dado muerte; y ahora están preparados, esperando tu promesa.
22. Entonces el tribuno despidió al joven, mandándole que a nadie dijese que le había dado aviso de esto.
23. Y llamando a dos centuriones, mandó que alistasen para la hora tercera de la noche doscientos soldados, setenta jinetes y doscientos lanceros, para que fuesen hasta Cesarea;
24. y que preparasen cabalgaduras en que, poniendo a Pablo, le llevasen a salvo ante Félix, el gobernador.
25. Y escribió una carta en estos términos: