49. El oficial del rey le dijo: —Señor, venga rápido antes de que mi hijo muera.
50. Jesús le dijo: —Vete a casa, tu hijo vivirá. El hombre creyó lo que Jesús le dijo y se fue a casa.
51. Camino a casa se encontró con sus siervos, quienes le contaron que su hijo vivía.
52. Él les preguntó a qué hora se había mejorado, y ellos le dijeron: —La fiebre le bajó ayer a la una de la tarde.
53. El papá se dio cuenta de que fue a la misma hora que Jesús le dijo: «Tu hijo vivirá». Él y todos los de su casa creyeron.